Córtame la respiración con un abrazo, devuélvemela con la mirada infinita que pones cuando evades al mundo, confírmame que aun sigo viva con el beso que no quiere llegar; el que se esconde en nuestros labios y que se mantiene a solas para no querer cortar la actitud equivoca de amistad...
...Lléname de tus silencios, esos que te ausentan las palabras, por que no existe la apropiada para responder al sentimiento, ese que demuestras cuando caminas detrás de mi; el que me llama a reír cuando haces una risa graciosa y tus labios dicen que han sido descubiertos...
... Derrama en mí todas las mañanas la ausencia de los enojos falsos, esos que desaparecen a nuestro encuentro.
Compra franquicias en el tiempo para alargar los momentos que presente son eternos, y ausentes parecen suspiros; atenta contra mi sensatez, esa que tanto te gusta cuando pronuncia con exactitud lo que deseas; róbate mis pensamientos para no adivinar los tuyos y así no complacerte tanto sin que me lo pidas, di una y otra vez que solo estamos tu y yo, que viva el momento para que yo pueda decir en mis adentros, que te odio por decir lo que quiero escuchar y sentir lo que siento.
Reprende la niña malcriada que te hace pucheros, a la que dices no ceder y terminas con tus brazos en su espalda.
Dame mas suspiros, esos que no toleras que se te noten, cédeme la carcajada que tienes al escuchar una locura; cuéntame lo que callas cuando me miras queriendo que yo haga lo que tú no te atreves.
“Son mas las horas de ausencia que tus minutos de respiración y aun así morimos por tener segundos que nos aniquilen con estos choques de amor”.
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