A diferencia de tu corazón, el mío, sabe como expresar lo
que siente por ti.
No me hacen falta indirectas, ni tiempos
perfectos en la vida para lograr hacerte saber lo que logras en mí.
A diferencia de ti, supe desde la primera vez que te vi, que me enamoraría
como una niña malcriada, la que comete errores encantadores que hacen que
pelees con tu corazón, y que se vale de detalles pequeñitos para alegrarte la
existencia.
Mi alma esta encadenada a una historia sin
fin, en cambio tú, vas volando en sentido apuesto de mi ruta, y me quieres
arrastrar a ti… Vamos desiguales, vamos desviados.
A diferencia de ti, mi amor no se
esconde, no tiene miedo, no se
cuestiona, solo sabe vivir lo que siente, aunque esto obtenga como resultado, mas daños que placeres. No vive de
apariencias, no intenta engancharse de personas ajenas a su voluntad.
Tengo un sueño que abarca un universo; a diferencia de ti que lo fuerzas a estar en
silencio. No conseguimos días de cuentos
de hadas, las horas pesan más y más en las noches, cuando los pensamientos se
apoderan de la cama, y los benditos segundos que se vuelven una irritante
espera de la felicidad.
Mi soledad es un espacio de complicidad absoluta
con mis paredes, donde expongo mis estrategias fallidas, mis versos frustrados
y mis miles de sonrisas marchitas; a diferencia de ti, que la soledad es un
espacio de horas entre el techo y tu pecho, buscando la solución a tus
sentimientos.
Puede que sea en tu vida la que revolvió tu
historia perfectísima, a diferencia de mí, que no tengo quejas de tus tantas
ausencias presenciales que te arraigan a mí ser.
“A diferencia
de ti, no se jugar este estúpido juego”.
Autor: Daviana Alvarado
No hay comentarios:
Publicar un comentario